TE VAS A ARREPENTIR

Cada centavo que gastes en una mujer, te vas a arrepentir.

Cada mejora que le financies,
cada terapia,
cada implante,
cada viaje,
cada cena,
cada capricho...

Lo va a disfrutar otro.

Otro que no movió un dedo.

Otro que no pagó nada.

Otro que llegó cuando tú ya habías hecho todo el trabajo sucio.

Porque las mujeres no cambian por el hombre que tienen.

Cambian para conseguir uno nuevo.

Se hacen el tratamiento,
se corrigen los dientes,
se ponen tetas nuevas,
empiezan a leer sobre relaciones…

No para agradecerte.

Sino para volverse más deseables para otro.

Para tener opciones.

Para “sentirse mejor consigo mismas”…
Justo cuando tú ya te estabas encariñando.

Tú creías que estabas formando a una compañera.

Pero solo estabas invirtiendo en su versión 2.0.

Una que ya no te necesita.

Una que ahora puede aspirar a algo mejor… según ella.

¿Y tú qué te quedas?

Con las deudas.

Con el desgaste.

Con el vacío.

Te lo digo claro:

No inviertas en una mujer.

Invierte en ti.

Hazte tú el atractivo.

Hazte tú el premio.

Porque cuando tú subes de nivel,
ellas hacen fila.

Cuando ellas suben de nivel…

tú eres el que sobra.

Un abrazo,
Tu Hermano Mayor,
Iván Barca.