EL JUEGO O LA NADA

El mundo no tiene piedad con los hombres débiles.

Lo ves en todas partes.

El tipo que lo da todo por una mujer

y termina como su confidente mientras ella se revienta con otro.

El hombre que se casa creyendo que ganó,

solo para descubrir que su esposa ya no lo desea.

El trabajador incansable que sacrifica su juventud

y se da cuenta, demasiado tarde,

que su estabilidad no le garantiza respeto ni admiración.

Este es el destino de los que nunca entendieron el JUEGO.

Porque sin JUEGO, no eres nada.

Sin Juego el mundo es oscuro y las mujeres un misterio

con Juego todo es claro y por fin puedes disfrutar de ellas

Las mujeres no eligen a los más buenos.

No eligen a los más trabajadores.

No eligen a los más correctos.

Eligen a los que las hacen sentir fuertes ondas emocionales.

A los que despiertan en ellas una necesidad incontrolable.

A los que entienden que la atracción no es lógica,

sino una guerra de poder.

Si sigues creyendo que lo único que necesitas es "ser tú mismo",

estás muerto.

Porque “tú mismo” no ha funcionado hasta ahora.

Porque ella no decide con la cabeza, sino con el instinto.

Y si no despiertas su instinto,

eres invisible.

El JUEGO es la única ventaja que tienes en un sistema

que está diseñado para aplastarte.

Si no sabes manipular sus emociones,

otro lo hará por ti.

Si no sabes cómo hacerla dudar,

cómo hacerla extrañarte,

cómo hacer que invierta en ti…

Serás solo otra historia que no merece ser recordada.

La pregunta no es si el JUEGO es importante.

La pregunta es:

¿Cuánto más vas a aguantar sin él?

Un abrazo.
Tu Hermano Mayor,